desbordaste mis ríos, mis acequias
y todo fueron fanfarrias y redobles de timbales.
Sueños de caracol
el susurro de una palabra,
una sugerencia
al rozarme.
El vuelo
de tu falda.
Tú hacías la magia.
Todas las sonrisas nuestras
eran cómplices
eran cómplices
en las mañanas,
y las noches
se hicieron para el deseo
de tenerte
de tenerme,
ebrio de orgasmos.
ebrio de orgasmos.
Así pasó del rosa
al negro,
las margaritas
crecieron en orquídeas,
el satén
en terciopelo.
Un fuego muy muy lento.
Y ahora,
lejos del Paraíso,
busco
en todas las pupilas
tu mirada.
Añoro el bajo continuo,
la sensación cálida,
la caricia entre las sombras,
tu palabra.
Hicimos de los puentes
cenizas aburridas
y ya no se puede bajar de la montaña.
Arriba,
solo el cielo.
¿Te acuerdas de Lulú?.
"Un amor que no se toma a la ligera".
"Un amor que no se toma a la ligera".
Después de Florencia,
de París,
del otoño en Madrid...
Después de ver el sol atardecido
sobre la Alhambra,
una tormenta obscura
en las montañas de León,
intuir, abajo, el paso lento del Júcar,
o el cielo de Barcelona,
no queda nada.
del otoño en Madrid...
Después de ver el sol atardecido
sobre la Alhambra,
una tormenta obscura
en las montañas de León,
intuir, abajo, el paso lento del Júcar,
o el cielo de Barcelona,
no queda nada.
Después de tus abrazos,
solo máscaras
venecianas.
Todo es de color,
pero siempre he preferido el blanco y negro,
ese toque azul y triste
el recuerdo de todo lo que te quise.
Hermoso sentir, reflejo de una historia... ♥
ResponderEliminarGracias!
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